Por Matías Rojas, Co fundador y Director de Proyectos Socialab
En este dinámico y a veces complejo escenario actual en el que vivimos, la innovación abierta se ha convertido en un instrumento esencial para las organizaciones que buscan no solo sobrevivir, sino también prosperar.
Al aprovechar la inteligencia colectiva, las empresas, ONG’S y gobiernos pueden integrar innovaciones que potencien sus modelos de negocio y amplifiquen su impacto socioeconómico y ambiental.
En Socialab, gracias a nuestra experiencia y red de trabajo en toda Latinoamérica, hemos identificado nueve variables clave para calibrar exitosamente un proceso de innovación abierta, y hoy queremos compartirlas con nuestra comunidad.
Estos principios, que desarrollamos con años de trabajo, no buscan ser solo una guía, sino que también buscan conocer si estamos haciendo lo correcto en el diseño de estos procesos.
1. Alcance del Público
Antes de lanzar una convocatoria, define claramente tu público objetivo ¿Busca soluciones a nivel local, regional, nacional o global?
Considera si la participación estará abierta a personas dentro de tu organización o al público en general, y si se enfocará en algún segmento etario o geográfico específico.
Si eres una empresa, ¿Buscas soluciones pre-competitivas o competitivas? Esta claridad ayudará a atraer a los innovadores más adecuados para el desafío.
2. Estado de desarrollo de las Propuestas
Determina el tipo de propuestas que deseas recibir ¿Estás interesado en ideas en estado inicial, proyectos en proceso de escalamiento, o ambos?
Establece cuántos proyectos finalistas y ganadores desea seleccionar y en qué nivel de desarrollo de la solución se centrará, pudiendo usar el indicador TRL (que usamos mucho en Socialab) para su evaluación.
Con esto, también deberás decidir qué documentos o respuestas las soluciones deben acreditar para validar su estado. Esto estructurará la manera en que evaluarán y apoyarán el crecimiento de las propuestas recibidas.
3. Incentivos y Recompensas
Define qué premios, fondos o incentivos entregarás ¿Capital semilla, contratos de compra, o inversión con equity?
Los incentivos deben alinearse con los objetivos de la convocatoria y ser lo suficientemente atractivos para motivar a los participantes de alta calidad.
4. Entregables y/o material requeridos
Especifica qué entregables deben presentar los participantes al final de la convocatoria. Esta claridad en las expectativas asegura que los resultados finales estén alineados con los objetivos de la organización y del llamado, para que los participantes entiendan lo que se espera de ellos desde el principio.
5. Comunicación y Difusión
Planifica cómo comunicar y difundir tu desafío ¿A través de medios internos, masivos, digitales, o tradicionales? La estrategia de comunicación debe maximizar la visibilidad del desafío y atraer a un amplio espectro de participantes.
6. Desafíos y Temática
Identifica y define claramente los desafíos que desea abordar. Asegúrate de que sean relevantes para la sociedad y que presenten un potencial de impacto social significativo.
Un desafío bien planteado añade valor al proceso y aumenta el interés de los participantes.
7. Duración y Cronograma
Determina la duración óptima de la convocatoria y fechas clave. Considera si hay eventos o hitos específicos dentro organización que podrían integrarse al proceso para enriquecer la experiencia y resultados.
8. Articulación y Aliados
Evalúa la participación de aliados internos y externos en el desafío ¿Involucra a colaboradores como mentores o evaluadores? ¿Colaborar con universidades, centros técnicos, o ONGs? Las alianzas pueden enriquecer el proceso y expandir su impacto.
9. Continuidad de los Proyectos
Finalmente, planifica qué pasara con los proyectos después de la convocatoria o el llamado al resolver el desafío. Debes decidir qué tipo de relación mantendrás con los ganadores y finalistas y cómo apoyar la continuidad y escalamiento de sus proyectos.
Si integras estos elementos en tu estrategia de innovación abierta, tu organización no solo tendrá desafíos más efectivos, sino que también fomentará una cultura de innovación que puede traducirse en soluciones sustentables y de alto impacto.
En conclusión, el éxito de un proceso de innovación abierta no se mide solo por la calidad de las ideas generadas, sino por la capacidad de una organización para transformar estas ideas en acciones concretas que tengan un impacto duradero. Es aquí donde la verdadera magia de la innovación abierta se manifiesta.
No solo se trata de recoger soluciones externas, sino de transformar internamente, aprendiendo a adaptarse y evolucionar con cada desafío lanzado. Este enfoque no solo resuelve problemas puntuales, sino que también cultiva un ecosistema de innovación resiliente que puede anticipar y moldear el futuro.
Al aplicar estratégicamente las nueve claves que hemos explorado, su organización no solo lanzará retos; será pionera en la creación de un mundo donde cada desafío es una oportunidad para innovar colectivamente. Eso es algo que, posiblemente, muchos aún no han considerado completamente: la innovación abierta no es solo un método, sino un viaje transformador para toda organización.
