Los sectores tradicionales de la sociedad hoy buscan como nunca antes la innovación para mejorar sus productos o servicios. Ideas frescas son bienvenidas especialmente en Latinoamérica, región de muchas carencias. Para llegar a los que tienen ideas y generar emprendedores, varios concursos de innovación y emprendimiento brindan una oportunidad increíble. Muchos se suman a un desafío así por el premio en dinero o servicios para potenciar nuevos negocios. Sin embargo, la participación te puede traer más beneficios de lo que imaginas, sin importar el resultado final.
Aplicación
Todos los concursos lanzan convocatorias para recibir ideas y a sus gestores. Normalmente el primer paso es llenar un formulario online. Ahí, uno necesita contestar algunas preguntas sobre su idea o proyecto. En esta etapa, tienes que explicar tu propuesta de valor. Eso implica reunir el equipo, revisar bien el cuestionario y aprovechar el momento para estructurar la idea de negocio. Es importante presentar un emprendimiento con potencial, ideas claras, viable y enfocado en resolver un problema. Herramientas como el Lean Social Canvas sirven para poner en una hoja y de manera muy sencilla la propuesta de un emprendimiento.
En esta etapa, el equipo sienta las bases de su proyecto investigando lo que se está haciendo en el sector donde quieren emprender. En seguida, es importante compararlos con la idea que tienen para al fin estructurar como sería este emprendimiento en el mundo real. Solamente en contestar algunas preguntas ya estarás generando una visión más integral y concreta de tu proyecto.
Presentación y pitch
En casi todos los concursos los que quedan seleccionados en un primer filtro siguen en el proceso con una instancia de presentación. Sea de manera online o física, los participantes tienen que explicar su idea a un grupo de jurados. Puede parecer un momento aterrador para los más tímidos, pero en verdad es un excelente ejercicio. Poder contar a otros la idea de tu emprendimiento y su impacto social es la oportunidad ideal para desarrollar tu comunicación y oratoria. Además, armar la presentación y los materiales que usen también potencia la creatividad y la visión comercial del equipo. Al fin y al cabo, tienes que exponer tu idea en el concurso así como la vas a exponer a tus clientes en el futuro. ¿Está bueno practicar desde ya, no?
Victoria si o si
Puede que logres al primer puesto – ojalá! Sin embargo, es importante reconocer que solamente la participación en la instancia ya te dio nuevas herramientas y conocimientos. Todo el equipo está más listo para presentar una idea estructurada, que tiene sentido y que es viable. Además, han mejorado su capacidad de comunicación al momento de transmitir su proyecto. Las actividades dentro del concurso te permiten adquirir este aprendizaje, así como el feedback que recibes de los jurados, personas con mucha experiencia en el ecosistema emprendedor.
Un premio que todos los participantes reciben en cualquier concurso es la red de contactos que construyen ahí. En un mismo espacio hay empresarios exitosos, organizadores del concurso, instituciones como incubadoras o universidades, otros emprendedores, representantes del gobierno. Todos los que facilitan o participan de la instancia son contactos que puedes generar y mantener una vez termine la instancia. En el día a día cuando estés llevando tu idea a cabo, seguramente el conocimiento adquirido por el equipo y los contactos que lograron van a ser un diferencial.
Participar de un desafío de innovación es el puntapié para empezar a poner tu idea en práctica. Conoce las convocatorias abiertas en Socialab para dar tus primeros pasos como emprendedor social.
Esta nota es fruto de la colaboración entre Socialab y TecLatam.
Para conocer más sobre el emprendimiento en Latinoamérica, sé parte de estas iniciativas!
